martes, 12 de agosto de 2014

El Trenecito de Artouste

Muy cerca de la frontera entre España y Francia, un pequeño tren hace una ruta de alta montaña hasta el lago de Artouste a casi 2000 metros de altura entre paisajes de ensueño. Es el "Trenecito de Artouste".

Trenecito de Artouste. Valle de Ossau

Todo empezó en 1924 con la construcción de la presa de Artouste en el Valle de Ossau; que con un volumen de 24 millones de metros cúbicos de agua; y mediante una maraña de canalizaciones que la conducen por dentro de la montaña  hasta las centrales hidroeléctricas del valle, abastece de energía eléctrica a todos los habitantes de la zona.

Para llevar a cabo esta obra hubo que transportar a más de 2000 obreros y muchísimo material y combustible, y fue por ello que se construyó un pequeño tren, el Trenecito de Artouste. Al finalizar la presa en 1932 se decide mantener y mejorar la infraestructura del tren para desarrollar el turismo de montaña en la zona. Y en los años 60 se construye la estación de esquí.

La temporada de funcionamiento del tren en 2014 empezó el 29 de mayo y acabará el 5 de octubre. Nosotros hicimos el recorrido en la primera quincena de junio, y gracias a ello pudimos ver todavía un montón de nieve. Salimos de la localidad de Sallent de Gállego, donde pasamos la noche. Fuimos por la A-136 pasando al lado de Formigal y cruzando el puerto del Portalet, y durante todo el camino fuimos con la boca abierta disfrutando del paisaje tipo anuncio de Milka, hasta que ya no aguantamos más y tuvimos que parar a hacer unas fotos.


Seguimos hasta la estación donde se cogen los tickets al lado del lago Fabrèges, un lugar rodeado de montañas y donde las vacas campan a sus anchas al lado del parking con sus cencerros, dándole un toque  muy bucólico. En el lugar hay varios restaurantes y tiendas de recuerdos.

La tarifa de adulto cuesta 24,5 €, e incluye viaje de ida y vuelta en teleférico, y el recorrido también de ida y vuelta en el tren hasta el lago de Artouste. Pero hay más tarifas que podéis consultar junto a los horarios en la web de la empresa que explota el tren. Nosotros al ir en temporada baja no tuvimos que reservar, no encontramos cola, y pudimos elegir el horario para el viaje de vuelta. En temporada alta es posible que haya que reservar con anterioridad, y para la vuelta ponen un horario fijo dejando 1h y 40 minutos para ver la zona de la presa.

El viaje en teleférico duró unos 10 minutos. Subimos desde una altura de 1250 m. hasta los 1900 a los que está la estación del tren flipando con el paisaje que se ve.
Con las prisas y la emoción no vimos los servicios públicos que hay junto al lago Fabréges (por cierto con desfibrilador, en España hay muchas instalaciones deportivas que no lo tienen), así que tuvimos que hacer una parada técnica en el restaurante Le Panoramic, donde nos atendió en español una chica encantadora que nos metió un buen sablazo por nuestros cafés. Eso sí, las vistas desde su terraza eran magníficas.

Vista del Pic del Midi de Ossau

Valle de Ossau

El tren parece de juguete y es muy similar al tren de la bruja de las ferias. El recorrido en él dura unos 50 minutos de ida y otros tantos de vuelta, y empieza atravesando un túnel muy oscuro y con algunas goteras, que mide unos 200 metros de longitud y que tiene una anchura ajustadísima al tamaño del tren, así que si vais con niños cuidado de que no saquen ninguna parte del cuerpo fuera. Al salir del túnel empieza lo bueno, unas vistas colosales del valle y de las montañas que lo encierran.

Vista desde el recorrido del Trenecito de Artouste
Uno no sabe hacia donde mirar. Se ven multitud de cascadas, al menos en la época en la que fuimos, ganado pastando en el fondo del valle, y a los lados de la vía se ven marmotas correteando entre las rocas, aunque hay que fijarse bien, porque por su color se camuflan perfectamente entre ellas. Si tenéis suerte también se pueden ver quebrantahuesos e incluso algún rebeco, pero no fue nuestro caso.



Al final llegamos a una pequeña estación a los pies de la presa de Artouste. Hay un pequeño bar-restaurante, y servicios públicos. Desde allí se sube por unas escaleras primero, rocas después, hasta el bonito lago de Artouste. La subida se hace en apenas 15 minutos y no es de mucha dificultad, eso sí, no es para hacer en tacones. Hay que tener cuidado en las rocas, y en la época en la que fuimos había muchos metros que estaban totalmente congelados y en los que había que extremar las precauciones, pero nada más.

Pequeña estación bajo la presa de Artouste

No hace mucho el lago debía de estar congelado, porque ese día todavía quedaba algún pequeño bloque de hielo.

Lago de Artouste
Desde allí parten varias rutas de montaña, por ejemplo se puede ir hasta el refugio de Arrémoulit. Nosotros dimos un paseo y luego nos comimos los bocatas que llevábamos, mientras disfrutábamos viendo las vistas del lago y los picos Lurien (2826 m.) y Palas (2974 m.). Al final nos liamos tanto que para no perder el tren de vuelta tuvimos que bajar al estilo cabra, brincando a toda velocidad de roca en roca, y aún así lo pillamos por los pelos.

Lago de Artouste

En el viaje de vuelta vimos más marmotas que en el de ida, pero fue imposible fotografiarlas.
En la estación de salida del trenecito hay un museo en el que se repasa la historia del tren y de la hidroelectricidad. También se pueden comprar recuerdos y productos típicos de la zona. La entrada es gratuita y está abierto todos los días de 13:30 a 19:30 horas.




Lo venden como el tren que circula a más altitud en Europa, pero parece que hay otros que le ganan. Por ejemplo en Suiza hay uno que sube hasta el Jungfrau, a 3400 metros. De todas formas y a pesar del precio os lo recomiendo. Es un recorrido con unos paisajes realmente espectaculares.

RECOMENDACIONES

Hay que recordar que estamos en la montaña, aquí el tiempo cambia rápidamente, nosotros por ejemplo ya notamos más frío en el viaje de vuelta que en el de ida, y eso que era a primera hora de la tarde y sin niebla.

Es importante llevar:
-Ropa de abrigo e ir preparados por si llueve. El día de nuestra ruta había 15 ºC y un vientecillo muy frío. Nos bastó con una camiseta, sudadera y un polar. Dos días antes estaban por debajo de 0 ºC.
-Calzado apropiado. Yo a principio de temporada llevaría botas de trekking, más adelante con calzado deportivo no hay problema. Por supuesto hay que descartar los tacones y las sandalias.
-Importantísimas las gafas de sol, gorra, protección solar y crema protectora para los labios.
-También aconsejaría llevar unos bocatas y algo de agua para comer junto al lago, y por supuestísimo una bolsa para los desperdicios. Por favor no hagáis el burro dejando todo tirado por ahí. Hay que mantener esta maravilla tal cual está.
-No os olvidéis de la cámara.

Se me olvidaba, en el tren está permitido llevar perros, así que coge a tu mascota y a disfrutar. Bon voyage!


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